
Cuando un conocido DJ de una emisora de radio en Londres pinchó la maqueta, la reacción de la audiencia fue muy favorable, lo que obligó al pinchadiscos a seguir emitiendo la música de los Knopfler y compañía.
Entre los oyentes de la emisora se encontraba un conocido mánager de Fonogram, a la búsqueda de nuevos talentos, y con quien Dire Straits firmó un contrato. Actuaron como teloneros del grupo norteamericano Talking Heads, en su gira por Gran Bretaña, lo que les permitió coger experiencia y darse a conocer. En marzo de 1978 publicaron su primer álbum, Dire Straits. Poco después comenzaron a hacer conciertos en solitario, incluso fuera del Reino Unido. El disco contenía temas como Down to the waterline, Wild west end o Lions.